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Cómo limpiar y mantener un lavavajillas

Cómo limpiar y mantener el lavavajillas

Si quieres que tu vajilla brille cada vez que se lave, es importante hacer un buen mantenimiento del lavavajillas. Si no se hace una limpieza regularmente, tu lavavajillas puede acumular residuos y provocar malos olores e incluso que la potencia del lavavajillas se reduzca.

En este blog te explicamos cómo limpiar fácilmente tu lavavajillas y cómo prevenir los problemas más comunes. También respondemos a las preguntas más frecuentes sobre la limpieza del lavavajillas. Sigue estos consejos para disfrutar de un lavavajillas limpio y en perfecto estado.

¿Por qué es importante limpiar el lavavajillas?

Tener un lavavajillas limpio es esencial para que su funcionamiento sea óptimo. Con el tiempo, la grasa, los restos de comida y la cal se acumulan en los filtros, los brazos aspersores y las gomas. Esto puede causar que el lavavajillas no se limpie bien y quede suciedad en los platos.

Los restos de comida y grasa pueden pudrirse con el tiempo y propagar malos olores en tu casa. Si enjuagas bien los filtros, limpias las gomas y haces un ciclo de limpieza con vinagre o detergente, garantizas que tu lavavajillas siga oliendo fresco y limpio.

Por último, llevar a cabo regularmente un mantenimiento alarga la vida de tu lavavajillas. La acumulación de suciedad y cal puede dañar los componentes internos de la máquina y con el tiempo pueden necesitar una reparación o incluso sustitución. Evita gastos innecesarios limpiando el lavavajillas de vez en cuando.

¿Cómo limpiar el lavavajillas?

Un lavavajillas limpio no sólo garantiza que los platos reluzcan, sino que también evita atascos, malos olores y desgaste. A continuación, puedes leer paso a paso cómo limpiar a fondo tu lavavajillas. Sigue estos pasos para prolongar la vida útil de tu lavavajillas y que rinda al máximo:

Paso 1: Limpia los filtros

Sigue estos pasos para limpiar correctamente los filtros del lavavajillas:
  1. Empieza retirando los filtros de la parte inferior del lavavajillas. La mayoría se pueden desenroscar o sacar directamente. Si esto no funciona consulta el manual.
  2. A continuación, enjuaga bien los filtros con agua tibia para eliminar la suciedad y la grasa. Si es necesario, utiliza un cepillo para rascar los residuos más resistentes. Limpia bien el borde del filtro que es donde suele acumularse la mayoría de la suciedad. Después, acláralos bien y sécalos si es posible.
  3. Vuelve a meter los filtros correctamente en el lavavajillas para evitar que entre suciedad en la bomba.
Después de esta limpieza, comprueba que las aberturas de los filtros están despejadas para permitir que el agua pase durante el lavado. Haz este mantenimiento con regularidad para evitar posibles atascos y mantener el lavavajillas en condiciones óptimas.

Paso 2: Limpia los brazos aspersores

Los brazos aspersores del lavavajillas se encargan de distribuir uniformemente el agua durante el programa de lavado. Si las salidas de agua se obstruyen con suciedad o cal, el programa de limpieza no funcionará correctamente. Por lo tanto, es importante mantener limpios los brazos aspersores.

Paso 2: Limpia los brazos aspersores

Los brazos aspersores del lavavajillas se encargan de distribuir uniformemente el agua durante el programa de lavado. Si las salidas de agua se obstruyen con suciedad o cal, el programa de limpieza no funcionará correctamente. Por lo tanto, es importante mantener limpios los brazos aspersores.
  1. Lo primero es desmontar los brazos aspersores. En la mayoría de los lavavajillas se pueden desmontar fácilmente o desencajarlos con cuidado. Si esto no funciona, consulta el manual.
  2. Aclara los brazos aspersores con agua tibia y utiliza un cepillo de dientes, un palillo o una aguja para limpiar las salidas de agua de restos de comida y cal.
  3. Una vez esté todo limpio, vuelve a colocar los brazos aspersores en su sitio. Gíralos una par de veces para comprobar que se mueven con suavidad.
Asegúrate de que las salidas de agua de los brazos aspersores estén bien limpias para que el agua pueda salir y hagan su función.

Paso 3: Limpia la goma del lavavajillas

La suciedad y el moho pueden acumularse en el borde de goma de tu lavavajillas tras un uso prolongado. Limpiar esta goma es importante para evitar malos olores y alargar la vida de las gomas. Sigue estos pasos para limpiar las gomas con eficacia:
  1. Empieza revisando el borde de goma de tu lavavajillas. Comprueba cuidadosamente si hay suciedad, grasa o moho, especialmente en los pliegues, donde es habitual que se acumule.
  2. A continuación, prepara una disolución limpiadora mezclando agua tibia con un detergente como el vinagre natural o de limpieza, o utiliza un producto de limpieza especial para gomas.
  3. Utiliza un paño suave o una esponja y mójalo en la disolución para después limpiar suavemente el borde de goma, sobre todo en los pliegues y las esquinas.
  4. Después de limpiar, pasa un paño limpio y húmedo por las gomas para eliminar todos los restos de la disolución limpiadora.
  5. Por último, seca bien la goma con un paño seco para evitar la formación de moho y prolongar la vida útil de la llanta.

Paso 4: Utiliza un limpiador de lavavajillas

Utilizar un limpiador de lavavajillas es la forma más sencilla y eficaz de limpiar a fondo el lavavajillas. Sigue estos pasos para hacerlo correctamente:
  1. Vacía el lavavajillas por completo para que el limpiador pueda hacer su trabajo sin obstáculos.
  2. Utiliza el limpiador:
    • Si utilizas una botella de limpiador para lavavajillas, quita el precinto y vuelca la botella en la cubertera o en la rejilla inferior del lavavajillas.
    • Si utilizas en polvo, gel o pastilla, colócalo en el dispensador o directamente en la rejilla inferior del lavavajillas, según las instrucciones del producto.
  3. Selecciona el programa de limpieza caliente, preferiblemente de al menos 60 ºC para que la grasa, la cal y la suciedad se disuelvan sin problemas.
  4. Pon en marcha el lavavajillas y deja que ejecute el programa sin interrupciones.
  5. Repite este proceso mensualmente o cada vez que notes el lavavajillas un mal funcionamiento o malos olores.
El limpiador de lavavajillas se encarga de eliminar la grasa, la cal y la suciedad acumulada para mejorar el funcionamiento del lavavajillas y su buen olor. Consulta siempre antes las instrucciones del envase del limpiador para saber las indicaciones específicas.

¿Cómo limpiar el lavavajillas con productos naturales?

Otra opción muy fácil y eficaz es limpiar el lavavajillas con remedios naturales como el bicarbonato y el vinagre.

Gracias al bicarbonato puedes neutralizar rápidamente los malos olores y eliminar los restos de grasa. Esparce una taza de bicarbonato de sodio por el fondo del lavavajillas y ejecuta el programa de lavado corto a la temperatura más alta. Conseguirás una limpieza a fondo y dejará tu lavavajillas fresco.

El vinagre es ideal para eliminar los restos de grasa y de cal más resistentes. Coloca un plato resistente al calor con una taza de vinagre natural o de limpieza en la rejilla superior e inicia el ciclo de lavado normal a alta temperatura. El vinagre tiene un efecto potente contra los olores y la suciedad incrustada.
 
Consejo de Druppie
CONSEJO
No utilices bicarbonato y vinagre en el lavavajillas al mismo tiempo ya que se neutralizan entre ellos y el efecto es menos potente.
 

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Preguntas frecuentes

¿Con qué frecuencia se tiene que limpiar el lavavajillas?

Limpiar el lavavajillas con regularidad es esencial para que funcione correctamente y evitar malos olores. De hecho, se recomienda limpiar los filtros semanalmente. También es importante hacer una limpieza a fondo mensual con un limpiador de lavavajillas. Y cada tres meses, es aconsejable limpiar también los brazos aspersores y los bordes de goma. Si sigues esta rutina de limpieza, tu lavavajillas seguirá funcionando de forma óptima, durará más y tu vajilla estará siempre reluciente.

¿Cómo eliminar los malos olores de un lavavajillas?

Empieza por limpiar los filtros de la parte inferior del lavavajillas enjuagando con agua templada y frotando con un cepillo. Seguidamente, limpia los bordes de goma con un paño y una mezcla de agua caliente y vinagre o un limpiador para eliminar la suciedad y la humedad de los pliegues. Revisa también los brazos aspersores por si están obstruidos y elimina la suciedad de las salidas para que el agua circule correctamente.

Si quieres una limpieza más profunda, utiliza un limpiador especial para lavavajillas para mantener tu lavavajillas con un olor fresco y una limpieza higiénica.

¿Qué hacer si los platos no salen limpios del lavavajillas?

Si tu vajilla no sale limpia del lavavajillas después del programa de limpieza, sigue estos consejos para solucionar este problema.
  • En primer lugar, comprueba y limpia los filtros de la parte inferior del lavavajillas, ya que las obstrucciones pueden impedir la circulación del agua. Si es necesario, limpia los brazos aspersores.
  • Utiliza siempre el detergente adecuado para el lavavajillas y comprueba que hay suficiente abrillantador y sal descalcificadora en el lavavajillas, sobre todo si vives en una zona con agua dura.
  • No coloques los platos demasiado juntos para que el agua llegue a todas las superficies.
Si revisas estos consejos y realizas un mantenimiento regular, tendrás un lavavajillas reluciente.

¿Cómo evitar que se atasquen los brazos aspersores?

Para evitar que los brazos aspersores del lavavajillas se atasquen, es imprescindible realizar un mantenimiento regular. Enjuaga los platos y sartenes antes de colocarlos en el lavavajillas para que los trozos grandes de comida no obstruyan la salida de los aspersores. Comprueba regularmente los brazos aspersores aflojándolos y limpiando las salidas con un palillo o una aguja fina para eliminar los residuos. También puedes ejecutar mensualmente un programa de lavado en caliente sin vajilla con limpiador de lavavajillas, para evitar la acumulación de grasa y cal. Si sigues estos pasos, el agua circulará de forma óptima y tu lavavajillas funcionará de forma más eficiente.

¿Cuál es la mejor temperatura para un ciclo de limpieza?

La mejor temperatura para un ciclo de limpieza en tu lavavajillas es de al menos 60 grados centígrados. A esta temperatura, la grasa, los restos de comida y las bacterias se eliminan con eficacia, garantizando un lavavajillas higiénico y fresco. Los programas calientes son especialmente útiles para una limpieza profunda con un limpiador de lavavajillas, ya que disuelven la suciedad y la cal más resistentes. Ejecutar un programa caliente con regularidad no sólo ayuda a mantener el lavavajillas limpio, sino que también prolonga la vida útil del lavavajillas.


¿Tienes alguna duda sobre cómo limpiar tu lavavajillas? Consulta nuestra página de preguntas y respuestas en la que respondemos a las preguntas más frecuentes. Por supuesto, si te queda alguna duda, nuestro servicio de atención al cliente también estará encantado de ayudarte.
 

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